Finalmente el gobierno provincial declaró la emergencia agropecuaria en los Departamentos del norte santafesino, acá pueden ver el decreto de Bonfatti del que habla la nota.
Abarca a los Departamentos 9 de Julio, Vera, General Obligado y San Cristóbal; que en los últimos años están abonados a este tipo de medidas; que la nota explica en que consisten: prórroga de los vencimientos del Impuesto Inmobiliario, suspensión por 180 días -después de finalizado el período de emergencia agropecuaria- de la iniciación y sustanciación de los juicios y acciones administrativas iniciadas por el cobro de impuestos.
Decíamos que en el norte de la provincia la situación de emergencia agropecuaria por sequía tiende a tornarse permanente, y si no, repasemos los antecedentes inmediatos al respecto; y para que vean que no nos las tomamos exclusivamente con los gobiernos del Frente Progresista, vamos a empezar con este decreto de Obeid; que en octubre del 2007 (mientras buena parte de la provincia estaba inundada) declaraba la emergencia agropecuaria por sequía en 9 de Julio, Vera, General Obligado y San Cristóbal hasta el 31 de diciembre de ese año.
Ese mismo asumió Binner, y al poco tiempo sacó este decreto, declarando la emergencia en los mismos Departamentos, desde el 1º de abril y hasta el 31 de diciembre de ese año (nueve meses de emergencia); y por este otro decreto agregaron a distritos de San Cristóbal y San Justo, con los mismos alcances.
Por si fuera poco, con éste otro decreto, extendió la medida con los mismos alcances a los distritos que faltaban de esos dos Departamentos, más los de Garay; y por éste, prorrogó la emergencia en todos hasta el 31 de marzo del 2009.
En junio del mismo año 2009 éste decreto prorrogó todas las declaraciones de emergencia anteriores hasta el 30 de septiembre; y en enero del 2010 lo empalmaron retroactivamente con éste otro, hasta el 31 de diciembre, con lo cual la emergencia agropecuaria era ininterrumpida ya desde el 1º de abril del 2008.
Y después de unos meses en que los productores agropecuarios se humedecieron (algunos, los dedos, para contar billetes) por éste otro decreto volvieron a declarar la emergencia desde el 1º de enero hasta el 30 de junio del 2011.
En cada caso les prorrogan los vencimientos del (ridículo, irrisorio) impuesto Inmobiliario Rural, les suspenden los juicios (porque aunque pagan monedas, evaden igual), les perdonan los intereses o directamente (si los declaran en zona de desastre) les condonan, lisa y llanamente, los impuestos.
Con esos datos en la mano, no hay que asombrarse que el Impuesto Inmobiliario (que tiene un peso insignificante en los ingresos del Estado provincial, en plena Pampa Húmeda) sea el único que tiene el signo menos cuando se comparan los ingresos por ese rubro, sea de un mes al otro, o al mismo mes del año anterior, o en el acumulado anual, como podemos ver acá (el cuadro es al 31 de octubre del año pasado, último dato disponible):
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