Cuando lo desplazaron a Gómez Centurión de la Aduana, estaba claro que se trataba de otra operación de márketing del macrismo para demostrar "que no tenemos compromisos con la corrupción". Cosa que queda más clara aun ahora que lo "reincorporaron".
Sobre el tema leíamos en La Capital: “La decisión de Macri se conoce luego de que el pasado 4 de octubre el juez federal, Ariel Lijo, que investigaba la denuncia anónima que había llevado al gobierno a suspender preventivamente a Gómez Centurión de su cargo, se declaró "incompetente" y envió la causa al fuero Penal Económico. La resolución le sirvió al desplazado funcionario para que el juez Lijo dejara asentado en un fallo que no había encontrado pruebas que lo comprometieran con el grupo que fue acusado en una denuncia anónima que llegó al Ministerio de Seguridad.”
Sobre el tema leíamos en La Capital: “La decisión de Macri se conoce luego de que el pasado 4 de octubre el juez federal, Ariel Lijo, que investigaba la denuncia anónima que había llevado al gobierno a suspender preventivamente a Gómez Centurión de su cargo, se declaró "incompetente" y envió la causa al fuero Penal Económico. La resolución le sirvió al desplazado funcionario para que el juez Lijo dejara asentado en un fallo que no había encontrado pruebas que lo comprometieran con el grupo que fue acusado en una denuncia anónima que llegó al Ministerio de Seguridad.”
Según la Disposición 359 de la AFIP
(completa acá en el Boletín Oficial del jueves): “..por Disposición
N° 290 (AFIP) del 19 de agosto de 2016 se suspendió en el ejercicio del
cargo de Director General de Aduanas al Licenciado Juan José GOMEZ CENTURION
(Legajo N° 80.041/32), hasta tanto se dilucidasen los hechos que
resultaran objeto de investigación en la causa judicial que se iniciara
oportunamente por denuncia recibida por el Ministerio de Seguridad y que
tramita por ante el Juzgado en lo Criminal y Correccional Federal N° 4."
Y agregaba: “Que
posteriormente, por Disposición N° 311 (AFIP) del 2 de septiembre de 2016,
se le asignaron transitoriamente al Licenciado Juan Jose GOMEZ CENTURIÓN,
funciones no ejecutivas de asesoramiento en el ámbito de la sede de esta
ADMINISTRACIÓN FEDERAL.”, cosa que se supo después: Gómez Centurión nunca se fue de la Aduana, aunque estaba investigado por corrupción. (las negritas son siempre nuestras)
y ahora lo reincorporaron a pedido de Macri, lo dice el visto de la Disposición: “VISTO
la Disposición N° 290 (AFIP) del 19 de agosto de 2016, y la Nota del 12 de
octubre de 2016 dirigida a esta Administración Federal por el señor Presidente
de la Nación, Ingeniero Mauricio Macri y ”
“Que
en la Nota del Visto se expresa que la decisión adoptada con respecto a la
suspensión en el ejercicio del cargo del Licenciado Juan Jose GOMEZ CENTURIÓN,
en la situación actual, incluyendo los trámites y tiempos judiciales, encuentra
en las actuales circunstancias mérito suficiente para permitirle al nombrado el
ejercicio del cargo como Director General de Aduanas. ”
La Disposición 290 AFIP del 19 de agosto que lo separó del cargo decía que: “...con el objeto de resguardar la
transparencia de la gestión, resulta conveniente suspender al titular de la
Dirección General de Aduanas en el cargo que actualmente desempeña, hasta tanto
se diluciden los hechos que resultan objeto de investigación en sede judicial. ” y así lo decía en su artículo 1º. (otra vez las negritas son nuestras)
Recapitulemos entonces: ante una denuncia "anónima" que le llegó al ministerio de Seguridad, Macri lo hizo desplazar de su cargo para "resguardar la transparencia de la gestión", pero el tipo siguió siendo asesor de la Aduana. Y la separación duraba "hasta que la justicia dictamine" si tuvo o no responsabilidad en hechos de corrupción.
La justicia no dictaminó nada, a menos que se considere tal que el juez Lijo se declaró incompetente, y remitió la causa al fuero penal económico. No obstante eso, Macri pide que lo reincorporen "porque hay mérito más que suficiente para hacerlo".
O sea que lo de la intransigencia con la corrupción, aunque sea propia, es otro verso más del márketing amarillo. Eso, o el presidente es un pelotudo que compra pescado podrido que le vende su ministra de Seguridad (proveniente de un probable ajuste de cuentas entre servicios de inteligencia), y obra en consecuencia.
Elijan las que más les guste.
2 comentarios:
Ls dos.
"El presidente es un pelotudo" es una buena síntesis.
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