LA FRASE

"QUE DESDE LA VICEPRESIDENCIA SE SOSTENGA UNA AGENDA QUE NO SEA LA DEL GOBIERNO ES ALGO QUE NUNCA SE HA VISTO." (JULIO COBOS)

lunes, 26 de diciembre de 2016

MACRI SIGUE CON ALERGIA AL TRABAJO


No, no nos estamos refiriendo al hecho de que el tipo pegó otras vez vacaciones (seguirá hasta el 8 de enero), superando el mes y medio de rajes en su primer año de mandato.

Estamos hablando del Decreto 1283 del 20 de diciembre, publicado hoy en el Boletín Oficial (verlo completo acá); por el cual Macri veta en su totalidad la Ley 27.331 sancionada por el Congreso para modificar el artículo 114 de la Ley de Contrato de Trabajo, y establecer el "salario mínimo profesional".

Según la norma vetada, se entiende por tal "...al establecido por las convenciones colectivas de trabajo, laudos arbitrales con fuerza de tales o actos dictados por autoridad competente, en los que se determine la remuneración por categoría profesional de la actividad o empresa que corresponda, el que constituirá la menor retribución que deba percibir el trabajador de que se trate."; introducido por la reforma con el objeto de fijar "...el establecimiento de un piso mínimo aplicable a todos los salarios fijados por convención colectiva o laudo arbitral con igual efecto, o estipulado mediante disposición de autoridad competente, para cada categoría profesional de la actividad o empresa de que se trate.".

Hace unos días atrás contábamos en ésta entrada que el Congreso había sancionado otras cinco leyes (iniciativas todas de Héctor Recalde) que modificaban la Ley 20.744 de Contrato de Trabajo, reconociendo y ampliando derechos en favor de los trabajadores; como por ejemplo el de suspender la prestación de servicios si los empleadores no cumplen con las normas vigentes en materia de higiene y seguridad del trabajo, o prevención de accidentes.

Decíamos entonces que curiosamente -o no tanto- Macri había evitado promulgar las cinco leyes mediante el decreto correspondiente, dejando que lo hiciera el mero transcurso del tiempo. Como si no quisiera ser co-rresponsable de la sanción de normas que achican el margen de discrecionalidad de los empleadores, su clase.

Sin embargo queda claro que a la hora de vetar una ley laboral (tal como hizo con la ley anti-despidos) no le tiembla el pulso, como pasa con el decreto publicado hoy, con argumentos muy sugestivos, como estos: "Que en consecuencia, la iniciativa provocaría una distorsión en nuestro sistema de relaciones laborales, al desvirtuar la noción del salario básico de convenio, que ha evolucionado como un instituto fundamental de la estructura retributiva que regula la negociación colectiva.

Que en tal sentido, en el marco de la autonomía garantizada tanto por el artículo 14 bis de la Constitución Nacional como por el Convenio N° 98 de la Organización Internacional del Trabajo, ratificado por Decreto-Ley N° 11.594/56, han sido los actores sociales quienes han definido el régimen de remuneración convencional de alcance obligatorio.

Que en dicho margen de libertad, las partes convencionales no se han visto restringidas para establecer niveles mínimos de remuneración con distintos alcances.

"Que en definitiva, atendiendo a la normal evolución que han seguido las relaciones colectivas de trabajo, y siendo allí donde los representantes de los trabajadores y de los empleadores pactan el diseño salarial que estiman más apropiado, la regulación legal de un salario mínimo profesional resulta una medida inoficiosa y contradictoria con la autonomía colectiva que el Estado Nacional debe reguardar y fomentar...". (las negritas son nuestras)

Como ven, a la hora de vetar una ley que favorecía a los trabajadores, Macri no vacila en defender la autonomía en la negociación colectiva para que las partes (trabajadores y empresarios) pacten salarios en el marco de las paritarias.

El mismo Macri que recibió el viernes en Olivos a la cúpula de la CGT para brindar por un año de entrega consensuada, y aprovechó la oportunidad para pedirles que sean moderados en los reclamos salariales el año que viene; y el mismo Macri que viene despotricando contra la presunta obsolecencia de los convenios colectivos de trabajo, y quiere promover la negociación salarial por "productividad" y por "metas de inflación futura". Sin ponerse colorado, el tipo.

Pero hay más en los fundamentos del veto, leamos: "Que finalmente, debe concluirse que una norma de estas características, por su rigidez y antigüedad conceptual, resulta contraria al modelo racional y moderno de regulación laboral que se busca promover en la actualidad, basado en la creación y protección del empleo, pero alejado de toda esclerosis legal que impida el desenvolvimiento de nuevas y creativas formas de organización del trabajo, que pueden ser acordadas en el plano colectivo, con pleno respeto del orden público laboral." (las negritas otra vez son nuestras)

Acaso se está refiriendo a casos piloto del nuevo ensayo de flexibilización laboral, como el convenio que acaba de firmar el gremio de los petroleros privados (conducido por el senador neuquino Pereyra, hombre de la CGT) con YPF para los campos petroleros de Chubut; fijando por ejemplo un régimen de trabajo mensual de 14 días pagos, 7 de franco (menos que Macri, igual) y 7 de suspensiones, sin goce de haberes.

1 comentario:

Anónimo dijo...

MACRI PORQUE VOS NOS ESTAS REPRESENTANDO Y DEFENDIENDO NOO???????


MIRA QUE CHIQUITO REYES NO ES NINGUN GIL DE GOMA??????????

NOO??????

CHARANANANA!!!!!!!

Y NO TOCA BOOOTON

NO SOMOS COCODRILOS SEÑOR CAIMAM.......