CHOCOLATE POR LA NOTICIA

 

¿Cuántas veces hemos escuchado en todos estos años a los dirigentes opositores, a los economistas estrellas del establishment y a los periodistas de los medios hegemónicos quejarse de los subsidios a las tarifas de los servicios públicos?

Que la bomba de tiempo, que se desalienta la inversión, que hay que sincerar las tarifas, que hay que garantizar un horizonte de rentabilidad a las empresas; todo eso junto o separado.

Y los funcionarios del gobierno de Binner llevaron un papel preponderante -como que no- en el coro de quejosos; con inverosímiles planteos sobre la discriminación, comparando a las ciudades de Santa Fe con el conurbano bonaerense (donde viven cuatro veces los habitantes de toda nuestra provincia) para determinar cuanta plata se gasta en subsidios al transporte por habitante.

Hace unos años, cuando el gobierno quiso bajar parte de los subsidios al consumo de gas por este decreto -que en realidad creaba un cargo específico para financiar obras de ampliación de la red de gasoductos, y la importación de gas en épocas de aumento de la demanda-, los socialistas fueron a la justicia, con Héctor Polino y el senador Giustiniani a la cabeza; y Pino Solanas -el candidato a Jefe de Gobierno porteño de Binner- organizaba con Claudio Lozano un cacerolazo a Olivos para protestar.

Lo que no les impide mantener un doble standard, y además mentir como por ejemplo hizo esta semana La Nacion,  justamente con las tarifas del gas; y poner el tema en tapa con título escándalo.    

Ahora están con el tema de la falta de gas oil subsidiado para los colectivos del transporte público -sí, ellos que el año pasado sub ejecutaron espantosamente las partidas del SISTAU- ,y descubrieron que si los subsidios desaparecieran, aumentarían las tarifas del transporte.

Chocolate por la noticia, amigos del socialismo: ni más ni menos que lo que viene sosteniendo el gobierno nacional desde hace más de 8 años, para defender la política de subsidios que ellos critican.

En el post anterior que está linkeado más arriba, pueden acceder a esta excelente nota del amigo Diego Rubinzal (de paso: el martes todos a ATE para escucharlo junto a Capitanich); en la que explica los fundamentos y los efectos de la política de subsidiar las tarifas de los servicios públicos.

Lo que no pueden explicar tampoco los funcionarios del gobierno provincial son estos decretos de Binner: uno, dos, tres, cuatro y cinco.

Cinco aumentos de las tarifas del transporte público de pasajeros de media distancia (líneas interurbanas), que, aunque muchos no lo sepan, están bajo la jurisdicción del Estado provincial; que es el que aprueba sus tarifas.

Y esos aumentos fueron dispuestos por Binner, en todos los casos, aunque estaban vigentes los subsidios nacionales por los que ahora reclaman.

Como las tarifas de electricidad: ocho veces aumentadas en menos de cuatro años, aunque no disminuyeron los subsidios nacionales a la compra de electricidad.

Y después hablan de profundizar las políticas de redistribución del ingreso.