LA FRASE

"HABÍA DOS BOTONES, UNO VERDE Y OTRO ROJO, Y YO PENSÉ "EL ROJO DEBE SER PARA VOTAR A FAVOR DE CUBA"." (DIANA MONDINO)

viernes, 2 de mayo de 2014

PROGRESISMO A LA VIOLETA


Leemos en La Capital sobre el simpático proyecto de ley que estarían consensuando las múltiples fracciones del multimarca FAUNEN para ajustrar automáticamente el mínimo no imponible de Ganancias, fijándolo en el equivalente a 10 salarios mínimos, vitales y móviles (SMVM).

Cifra que la diputada Donda estima en unos 19.000 o 20.000 pesos mensuales; ignorando que el salario mínimo está en $ 3.600 desde el 1º de enero; con lo cual la suba propuesta sería en realidad hasta unos $ 36.000 mensuales, o sea bastante más. 

O lo que es lo mismo decir, en más de 7 veces el promedio de las remuneraciones de los trabajadores en actividad, tal como lo apunta acá Artemio; cuyas consideraciones sobre la escasa oportunidad del planteo no podemos sino compartir.

Escasa oportunidad, y dudoso progresismo: atar a la evolución de una variable como el Salario Mínimo Vital y Móvil (que tutela con un "piso" legal a los sectores de trabajadors más vulnerables de toda la fuerza laboral), la desgravación impositiva de los salarios más altos de la escala (los que pagan Ganancias), en un escenario de marcadas fragmentación y disparidad retributiva es, lisa y sencillamente, un soberano disparate.

Que sólo se puede entender desde la lógica clientelar de partidos de clase media, que pugnan con otras expresiones políticas de distinto sello por las mismas fracciones del electorado; aunque haya que destacar que  -volviendo sobre sus pasos- no hayan planteado (como lo hizo el massismo) reajustar el mínimo no imponible por la inflación; dando el argumento perfecto para que los empresarios cuelen su reclamo de actualizar con el mismo método los balances de las empresas, para licuar su carga impositiva por Ganancias.

Si la suba del mínimo no imponible de Ganancias (que depende de una decisión del Estado, con un ojo puesto en sus ingresos fiscales) quedara atada a la evolución del salario mínimo (que se rige por discusiones tripartitas entre empresarios, trabajadores y el Estado), un primer efecto verificable sería lograr sellar una alianza -tácita, pero no menos real- entre los empresarios (que son siempre reacios a reajustar el SMVM) y el Estado; que temería aumentarlo en demasía, porque por la "cláusula gatillo" que se pretende imponer, resignaría mayores ingresos por impuestos.

Y que no se diga sencillamente que la solución sería intentar captar otras rentas para reemplazar el impuesto a los salarios más altos, porque cuando se planteó la discusión de nuevos impuestos para compensar la suba del mínimo no imponible a los valores actuales (que dejan a más del 90 % de los trabajadores afuera del impuesto, antes de las paritarias), todos los repetidores del sonsonete de "el salario no es ganancia" (entre los que se incluye Donda), votaron en contra con variados argumentos.    

En fin, tal como lo plantea Artemio, otro extravío conceptual fruto de concentrar las demandas en el Estado y no en las patronales; al que tampoco es ajeno el sindicalismo, incluyendo el oficialista.

2 comentarios:

GrouchoMarx dijo...

En realidad, el impuesto a las ganancias es un desquilombo enorme y se sigue agravando con parches hechos para quitarle banderas a ma$$a.

El MNI, para 2013, es de $ 15.120 ANUALES (¿se entendió?). O sea $ 1.260 mensuales.

Voy a poner un ejemplo, algo extremo y simplista, para ver lo irracional del sistema. Supongamos una mujer soltera cuyo único ingreso es el alquiler de un pequeño local heredado.
Percibió $ 3.000 netos por mes, suma inferior a un SMVyM. Sin embargo resultará alcanzada a pagar $ 2.467,20 por el año 2013.
Un empleado del Estado que en 2013 percibió un bruto inferior a $ 180.000, con la reforma de agosto pasado no paga nada.

Las escalas también están totalmente planchadas.
Un asalariado que supera los 30.000 brutos, entra de cabeza en el máximo de la escala y paga el mismo porcentaje que una multinacional. Otro despropósito.

El parche de agosto sirvió para descomprimir la bronca que estaba llevando agua al molino del tigrense, pero complicó cada vez más el sistema. Es imprescindible ordenar este mamarracho (que viene de herencia del cro. Cavallo). De todas maneras, lo de Donda es impresentable.

La Corriente Kirchnerista de Santa Fe dijo...

Lo que no invalida el punto central del post: es un problema que aqueja hoy al 10 % de los trabajadores registrados, o sea el 6 o 7 % del total de los asalariados; lo cual es indicativo de la prioridad que debería tener.