FIEL A SU NATURALEZA, EL POPULISMO SOSTIENE EL CONSUMO PARA GANAR LAS ELECCIONES

Ya lo dijo claramente Ernesto "Canaleta" Sanz cuando celebraba la rosca con el PRO: este año la disputa será entre el populismo autoritario y la democracia republicana.

Y el populismo -se sabe y nos lo recuerda acá Mariano Obarrio- tiene la maléfica costumbre de gobernar con el exclusivo propósito de ganar elecciones; para lo cual apela a la pérfida maniobra de tomar medidas para que la gente lo vote.

Medidas como las que anunció ayer Cristina en cadena nacional, a saber: 

* Renovate: para cambiar el lavarropas o la heladera por uno nuevo de producción nacional con mejor eficiencia energética. Como los fabricantes, las grandes cadenas comercializadoras y el Estado harán aportes al plan, el precio final será en promedio 20 por ciento inferior al de mercado. Si el recambio se hace durante el fin de semana, los consumidores podrán acceder a las cuotas del programa Ahora 12. Ya están adheridos a la iniciativa Garbarino, Frávega, Rodó y Musimundo en el área metropolitana.

La logística quedará a cargo de los comerciantes: los vendedores pasarán por los hogares a retirar los electrodomésticos en forma gratuita. El programa busca apuntalar un rubro relevante para la producción: constituye un 2% del Valor Bruto de Producción y un 1,4% del empleo industrial. 

* A Rodar: El Banco Nación ofrecerá créditos prendarios por hasta 160 mil pesos para la compra de taxis. Los préstamos financiarán hasta el 80 por ciento del valor del vehículo y tendrán una tasa fija de 17,5 por ciento durante los primeros tres años, aunque el financiamiento podrá extenderse durante un año más con costo financiero variable. La línea subsidiada por el Ministerio de Economía estará disponible para individuos y pymes que sean propietarias de licencias de taxi. 

La medida representa un esfuerzo estatal adicional para contener la caída en los niveles de producción automotriz y, fundamentalmente, el empleo asociado a la actividad así como sus eslabonamientos en la industria autopartista. 

* SUBEneficio: A partir del 1º de abril, hoteles, restaurantes, bares, peluquerías, jugueterías, ferreterías, heladerías, gimnasios, cines y teatros, farmacias y librerías ofrecerán beneficios a los casi 9 millones de usuarios de la tarjeta SUBE. El mecanismo será similar al de otras tarjetas de fidelización y es complementario del Ahora 12. 

El programa creó la página <www.subeneficio.gob.ar>, donde el consumidor puede encontrar los comercios adheridos, seleccionar el negocio al que se acudirá a comprar, y cargando el número de su SUBE obtendrá un cupón de descuento. El consumidor podrá imprimirlo o mostrarlo a través del celular, y deberá registrar la transacción a través de la tarjeta SUBE, con lo cual obtendrá una rebaja sobre la totalidad de la compra. Pero el consumidor podrá abonar con cualquier medio de pago. 

* Infraestructura eléctrica: Son 400 millones de pesos orientados al desarrollo de infraestructura en sectores postergados. El objetivo es garantizar la calidad y seguridad en el suministro eléctrico en 100 mil viviendas con instalaciones precarias. Para eso, se reacondicionarán los tendidos eléctricos y se instalarán tableros de seguridad e interruptores en los domicilios. Apunta a beneficiar a más de 2 millones de habitantes en todo el país que viven en villas y barrios carenciados. Su implementación será coordinada con las provincias y los municipios. 

* Nuevo esquema de subsidios a las garrafas sociales: a partir de ahora, las transferencias de recursos serán para la demanda, es decir, los hogares vulnerables que no tengan acceso a la red troncal de gas. Todos los meses se depositará en las cuentas de los beneficiarios la diferencia entre 20 pesos, que es lo que debe pagar la persona, y el valor de mercado. Los interesados deberán inscribirse en la Secretaría de Comercio Interior. Serán 2,5 millones de viviendas que recibirán el subsidio de manera directa. En total, el Estado aportará 3000 millones de pesos para los subsidios.

En este nuevo esquema, el Ministerio de Economía trabajará en conjunto con la Anses, que aportará la logística para que los recursos sean depositados en la cuenta bancaria de los beneficiarios. El costo de las garrafas de 10 kilos para el beneficiario será de 20 pesos. Aquellos que estén en la zona norte y centro del país, con hogares compuestos de hasta cinco personas, recibirán un subsidio por año de 1232 pesos, que les permitirá adquirir 16 garrafas. En el caso de hogares con más de cinco habitantes, el subsidio será de 1540 pesos, lo que les permitirá comprar hasta 20 garrafas. En la zona de la Patagonia, los hogares con cinco habitantes recibirán una transferencia de 1540 pesos, que les permitirá adquirir hasta 20 garrafas, y para los hogares con más habitantes, los recursos serán de 1848 pesos, equivalentes a 24 garrafas.

Con la implementación de Hogar se  subsidiará la demanda de 2,5 millones de personas necesitadas, que recibirán el dinero todos los meses por adelantado en las cuentas bancarias. Los hogares más carenciados podrán acceder a 39,5 millones de garrafas de 10 kg a $ 20 cada una, lo cual implica una inversión social de  $ 3000 millones.

Hay quienes sostienen (como acá Alejandro Robba, traído a colación por Artemio) que este combo populista hasta sería algo parecido a la continuidad de un plan económico heterodoxo destinado a sostener la actividad, el empleo y el consumo; lo que va claramente en contra de lo que han sido hasta acá las generales de la ley en esta materia en nuestro país. 

Así no salimos, eh.