LA FRASE

"VOLVÍ PARA OFRECERLE AL PRESIDENTE MI COLABORACIÓN PARA RESOLVER EL PROBLEMA DE LOS CANDIDATOS QUE PROPUSO PARA LA CORTE." (FABIÁN RODRÍGUEZ SIMÓN)

sábado, 23 de diciembre de 2023

LÍMITES

 

El DNU de Milei es groseramente violatorio de la Constitución Nacional por donde se lo mire, y no pasa un mínimo control o test de razonabilidad. Ni en la justicia ni en el Congreso. No hay discusión al respecto, ni siquiera entre los "constitucionalistas" del régimen.

No cumple con ninguno de los parámetros que exige la Constitución al respecto, y el debate jurídico en torno a semejante engendro no debería exceder de los 10 segundos. Más de eso, es tiempo perdido al pedo. Pero la cuestión es todo menos jurídica: no faltarán jueces que lo convaliden, ni diputados o senadores dispuestos a levantar la mano para aprobarlo.

Solo con su dictado, Milei y su gabinete se han largamente acreedores a ser destituidos por juicio político, por violar la Constitución. Lejos de arrepentirse, están amenazando con sacar más como ése, demostrando por donde se la pasan.

El DNU no resuelve ningún problema grave ni urgente del país, ni le otorga o amplía derecho alguno a nadie, ni le va a mejorar su vida. Todo lo contrario: está pensado quirúrgicamente para cagarle la vida a la inmensa mayoría de los argentinos, en beneficio de un puñado. Acaso en éste punto merezca detenerse un poco más para explicárselo a quienes se verán afectados por él, pero sin perder de vista que en muchos casos (en especial tratándose de votantes de Milei) uno puede estar tratando con gente con capacidad cognitivas diferentes.

El DNU no tiene ningún propósito patriótico, noble, altruista, de interés común o bienestar general, por el contrario: es una burda y vulgar piñata de negocios privados en la que todos los sectores del poder económico aportaron letra, esperando llevarse su pedazo de la torta, y lo consiguieron: Galperín el negocio de las cuentas sueldo, los bancos exprimirnos aun más con las tarjetas de crédito, Lewis y el emir de Qatar la derogación de la ley de tierras, Funes de Rioja y la COPAL la derogación de la ley de abastecimiento, Paolo Rocca y la AEA la flexibilización laboral, y así podríamos seguir.

Basta recorrer los diarios y medios estos días para ver quienes lo apoyan, y sabremos quienes realmente lo redactaron: Milei es apenas el chancho al que le pegaron los cacerolazos y protestas, para que aparecieran los dueños reales. Todo está muy claro y sobre la mesa, para el que lo quiera ver.

De modo que el problema que plantea el DNU no es jurídico, ni de confusión o incertidumbre, sino estrictamente político: nada más ni nada menos que el dilema central de la política, que es la cuestión del poder. Milei dictó el decretazo porque pudo, y porque cree que puede sostenerlo, sin costo. O que puede pagar los costos que le implique, por ejemplo reprimir la protesta social. Esa es su convicción. La pregunta es cuanta convicción en contrario hay de éste lado. 

Cristina dijo en su momento -aquel ya lejano 9 de diciembre de 2015- "va a pasar lo que ustedes quieran que pase". En realidad debió decir lo que dejemos que pase. O como diría el Indio, "Este asunto está ahora y para siempre en tus manos...". Tuits relacionados:

1 comentario:

Anónimo dijo...

Al helicóptero ya se le hizo el service.
Si el DNU es rechazado por ambas Cámaras, el piloto lo pasa a buscar.
El Colo.